Algo se mueve en el fondo
del Chaco Boreal
sombras de bueyes y carro
buscando el confín,
lenta mortaja de luna
sobre el cachapé;
muerto el gigante del monte
en su viaje final.
¡Vamos… Tigre… Toro…
Chispa… Guampa…!
Y va encendiendo la floresta
el chicotazo al estallar
Zambita para que canten
Los humildes de mi pago
Si hay que esperar la esperanza
Más vale esperar cantando
Si hay que esperar la esperanza
Más vale esperar cantando
Nacida de los boliches
Donde el grito alza su llama
Su canción de largas lunas
Sabe
Noches de jazmín, noches nunca iguales
Arpa guaraní, voz del corazón
porque fui feliz en sus naranjales
hoy te cantaré mi mejor canción.
Mi mejor canción, plena de nostalgia
llevará hacia ti mi fiel esperanza
y te cantará sin prisa ni pausa
todos mis recuerdos del Paraguay.
Estés donde estés
Greda y horizonte
Violenta piel solar
Viene el viento duende
Por el arenal
Fuego cruza el Zonda
El mapa vegetal
Germinando el año
Como un Dios rural
Caudillo del clima
La luz lo ve bailar
Rojo en la pollera
De la inmensidad
Por agosto va
La Luna invernal
Vamos, viento, vamos
Siempre
El viejo rio que va
Cruzando el amanecer
Como un gran camalotal
Lleva la balsa en su loco vaivén
Rumbo a la cosecha cosechero yo seré
Y entre copos blancos mi esperanza cantaré
Con manos curtidas dejaré en el algodón
Mi corazón
La tierra del chaco quebrachera y montaraz
Prenderá en mi sangre
Por el paraná
Jangadero va
Madera y canción
Hacia el confín
Del litoral
Largo palo obscuro buscando
El vientre del río
En las manos bronce y coraje
Como un desafío
Y en los ojos una esperanza
Como el canto mío
La marea prende en los juncos
Un grito de espuma
Cuando el río brama violento
